Aptitudes que hay que buscar en los nuevos empleados
Cualquiera que haya pasado por un proceso de contratación lo sabe: a menudo, el número de candidatos, habilidades, objetivos y experiencia puede ser bastante complicado.
Cuando llega el momento de contratar a un nuevo empleado, encontrar al candidato adecuado puede ser todo un reto, especialmente cuando se le juzga basándose en un breve historial y en los comentarios enlatados de un currículum o una carta de presentación. Incluso los que superan el proceso de selección inicial pueden ser fáciles de juzgar mal.
A todos nos ha pasado: el candidato que hizo una gran entrevista, que tenía una carta de presentación estelar y un currículum impecable, pero que no ha tenido un buen rendimiento en el trabajo. Al cabo de unos meses, te sientes incómodo, preguntándote qué ha pasado y en qué te has equivocado. Sobre el papel, parecía una gran elección.
Hay algunas aptitudes que puede buscar en los candidatos que quizá no aparezcan inicialmente en su currículum, pero que pueden ayudarle a tomar la decisión correcta. Como propietario de una pequeña empresa, a menudo tienes que dirigir un barco con pocos empleados, y un error de contratación podría hacerte perder meses de tiempo e ingresos.
Haga la elección correcta desde el principio teniendo en cuenta estas 8 habilidades que hay que buscar en los nuevos contratados.
1. Consideración de sus necesidades
No preguntes lo que tu potencial empleador puede hacer por ti… Un buen empleado potencial debe hacer preguntas sobre las ofertas y expectativas del trabajo, por supuesto, pero debe centrarse en lo que puede aportar.
Si alguna vez has entrevistado a alguien y has tenido la sensación de que has sido tú quien ha hablado o vendido, da un paso atrás. El empleado potencial debe querer el trabajo y decirle lo que puede hacer por la empresa (y no al revés).
Pregúntele sobre las veces que se preocupó por las necesidades de sus compañeros de trabajo, o una vez que hizo algo por otra persona. Parece una pregunta extraña, pero un empleado considerado y generoso tratará a su empleador (y a los clientes) con la misma amabilidad. Cualquiera que conozca el servicio al cliente sabe que el cliente siempre tiene la razón. Usted quiere que todo su equipo ponga a los clientes en primer lugar.
2. Creativo
Aunque no te dediques a un campo creativo, en el mercado laboral actual un poco de creatividad puede llegar muy lejos. Fíjate en los currículos que son llamativos, en las cartas de presentación que destacan o en los candidatos que encuentran una forma de destacar entre la multitud.
En las pequeñas empresas, los enfoques creativos para la resolución de problemas son vitales. Usted quiere empleados que muestren ideas creativas y que puedan pensar de forma innovadora. Incluso si el trabajo no requiere actividades creativas tradicionales.
Pregunte a los entrevistados sobre alguna vez que hayan abordado un problema de forma creativa para obtener un resultado diferente, aunque no esté relacionado con el trabajo. ¿Cómo de rápido piensan en sus pies y qué tipo de pensamiento avanzado muestran en su respuesta?
3. Atractivo y personal
Algunos grandes candidatos no son buenos por naturaleza en las entrevistas. Puede que estén nerviosos o sean aprensivos. Puede que deseen tanto el trabajo que teman hacer o decir algo incorrecto, por lo que se contienen.
Incluso una persona nerviosa debe ser cálida y atractiva. Debe hablar contigo abiertamente, ofrecerte contacto visual, una sonrisa y un firme apretón de manos. Debe escuchar tus preguntas con atención y no interrumpirte ni hablar por encima de ti (aunque esté muy emocionada por dar una respuesta).
Imagínese que estuviera hablando con un cliente o una clienta. ¿Qué comportamiento esperarían usted y el cliente? En una entrevista, el candidato debe mostrar esas mismas habilidades de escucha y personalidad, incluso si es un poco tímido.
4. Experiencia con los datos
Tal vez tenga un software interno o propio con el que el candidato no esté familiarizado o necesite formación. Muchas empresas lo tienen, y puedes perderte un gran candidato si solo buscas a alguien que esté familiarizado con tu programa de facturación, software de contabilidad o gestión de proyectos.
Sin embargo, en el lugar de trabajo actual, los conocimientos informáticos son prácticamente obligatorios en todos los ámbitos, y los empleados potenciales deberían poder hablar de alguna vez que hayan tratado con datos, ya sea gestionando un CRM para contactos de clientes o recopilando pedidos e informes. Pregúntales sobre su nivel de comodidad y cómo abordarían un proyecto.
Sea cual sea su función en la empresa, deben ser capaces de gestionar los contactos y el correo electrónico, manejar un calendario y ofrecer conocimientos básicos de informática. La experiencia y la comodidad con los sistemas de bases de datos garantizan que son lo suficientemente expertos en tecnología como para adaptarse y aprender cualquier software que puedan encontrar en el trabajo.
5. Atención al detalle
La atención a los detalles brilla en las cartas de presentación, los currículos y el perfil de LinkedIn del candidato. También puedes fijarte en cómo se presentan, qué tipo de atención prestan a las instrucciones y el papeleo, como las solicitudes y los formularios de antecedentes.
Todo el mundo comete errores, y no querrás rechazar a un gran empleado por una situación fortuita, pero múltiples errores tipográficos, una apariencia descuidada o alguien que parece no poder seguir las instrucciones básicas durante el proceso de la entrevista es definitivamente una señal de alarma.
Los candidatos deben querer dar lo mejor de sí mismos. Deben prestar mucha atención a las instrucciones y peticiones que se les hagan durante el proceso de la entrevista. Deben llegar a tiempo a la entrevista y presentar un currículum limpio y bien redactado, una carta de presentación y posibles referencias si se les solicita.
6. No lo saben todo (pero están dispuestos a aprender)
La disposición a aprender nuevas tareas es casi tan valiosa como el empleado que dice que ya las conoce todas. Rara vez se espera que un entrevistador conozca todo el software de la empresa o el lenguaje específico que podría no haber encontrado en su anterior trabajo.
Los grandes empleados potenciales, deben admitir cuando no saben algo. Deben estar dispuestos a ser honestos sobre su experiencia y mostrar una apertura e incluso un entusiasmo cuando se trata de aprender cosas nuevas.
Pregunte a su candidato a la entrevista por la última vez que aprendió una nueva habilidad -relacionada con el trabajo o de otro tipo- y si puede contarle la experiencia. Deberían ofrecer algunas ideas de su proceso de aprendizaje y hablar de cómo crecieron y ampliaron sus conocimientos cuando se enfrentaron a una nueva situación.
7. Hable bien de sus anteriores empleadores
Cuando alguien llega a un nuevo trabajo, lo más probable es que haya dejado su anterior empleo por una buena razón. Quizás ya no se ajustaba a sus necesidades o a su personalidad. Tal vez había malos sentimientos o algo sucedió.
Cuando un empleado se presenta a una entrevista para un nuevo puesto, aunque haya dejado su anterior trabajo en las peores condiciones, debería ser capaz de explicarle los aspectos positivos de su trabajo en esa empresa. ¿Qué experiencias tuvo allí y qué aprendió?
Piénsalo: algún día, si dejan tu organización, podrían decir lo mismo de ti. Un empleado que se responsabiliza de su papel en una mala adaptación al puesto de trabajo está demostrando perspicacia e inteligencia emocional. Usted quiere contratar a alguien que entienda su encaje en el mundo que le rodea. En lugar de un empleado que hable de cómo las cosas fueron injustas, o de cómo fue culpa de otros, usted quiere a alguien que pueda hablar de cómo utilizó la experiencia para levantarse por sí mismo y seguir adelante.
8. Tener una reputación limpia
En los tiempos que corren, los empleados deberían ser lo suficientemente inteligentes en las redes sociales como para saber cómo ajustar su configuración de privacidad. Si puedes encontrar fotos de ellos haciendo keg-stands en la universidad (o el último fin de semana), lo más probable es que no se preocupen por su reputación o que no sepan cómo evitar compartir información privada. Ambas cosas no son buenas cualidades para un posible candidato a un puesto de trabajo.
Si alguien no se preocupa lo suficiente como para mantener su vida personal, sabes que puede salpicar a la oficina más adelante. Piensa en tu cliente más delicado y snob (o más testarudo), ¿qué pensaría si viera el perfil de este posible empleado?
En algunos campos, compartir y la reputación social no es tan crucial, pero todo el mundo debería tener suficiente conocimiento de las redes sociales y de Internet para mantener su vida privada fuera del lugar de trabajo y lejos de los ojos de su posible nuevo jefe.
Las empresas informan de que hasta el 50% de las nuevas contrataciones resultan ser inútiles. Con una estrategia de contratación inteligente, puede encontrar un empleado que sea excelente para su empresa. Puede resultar intimidante revisar un sinfín de currículos, pero no pierdas de vista a los que destacan por encima de los demás.