Los errores más comunes de los nuevos empresarios
Convertirse en empresario no es para los débiles de corazón. Además de poseer un conjunto de habilidades cruciales, un buen empresario debe tener también un buen sentido del juicio. Y también debe aprender de los errores que otros han cometido en su campo.
En este artículo, vamos a abordar algunos de los errores más comunes que cometen los empresarios en ciernes y cómo puedes evitarlos.
Intentar hacer lo que todo el mundo hace
Uno de los errores más comunes que cometen los nuevos empresarios es intentar hacer lo que hace todo el mundo. Cuando hay una oleada de nuevas empresas en un sector o tipos de productos que aprovechan una tendencia de moda, tratar de seguir a la multitud es el peor error que se puede cometer. En el mejor de los casos, estará compitiendo con empresas más consolidadas mientras que tanto los prestamistas como los clientes le consideran un Johnny venido a menos. En el peor de los casos, estás tratando de iniciar un negocio justo cuando ese mercado está saturado y estás condenado a fracasar porque el interés está cambiando.
No montes un negocio porque es lo que hace todo el mundo. Busque los mercados sin explotar, las comunidades insuficientemente atendidas y las necesidades no satisfechas. Ahí es donde reside el mayor potencial, así como la menor competencia.
No se ofrece lo que la gente necesita
Una de las mayores formas en que un empresario puede fracasar es no ofrecer lo que la gente necesita. Un ejemplo de ello es una aplicación genial que no hace lo que su mercado objetivo quiere que haga. Otro ejemplo sería una aplicación de software de contabilidad que se aleja tanto de la forma en que los clientes esperan utilizarla y que carece de funciones esenciales que está condenada al fracaso.
Una forma de tener éxito es aplicar ingeniería inversa a lo que funciona y mejorarlo. Otra forma es combinar servicios o productos complementarios en un paquete para reducir el coste total para los consumidores. En todos y cada uno de estos casos, fracasará si no sabe qué quiere y necesita su cliente ideal y sus criterios para satisfacer esas necesidades.
Excederse y gastar antes de tener los ingresos
Algunos de los peores errores que cometen los nuevos empresarios son de tipo financiero. Abandonar el trabajo diario y la única fuente de ingresos cuando sólo se tiene el germen de una idea y ningún plan para llevarla a cabo, y mucho menos para obtener beneficios, es un caso. Otro es invertir los ahorros de toda la vida en el diseño de un producto sin un plan sobre cómo venderlo, comercializarlo o distribuirlo, arriesgando tu estabilidad financiera en un tiro al aire.
Y para los que consiguen obtener inversores o grandes préstamos al principio, hay una mala tendencia a añadir personas a la nómina sin un plan claro sobre cómo utilizarlas para aumentar los ingresos.
Las soluciones para este problema incluyen hacer un estudio de mercado y revisar el producto mucho antes de invertir en la fabricación, evitar las deudas y los inversores hasta que no puedas crecer sin la infusión financiera, comprar tu producto o servicio y conseguir contratos o pedidos iniciales antes de ponerte formalmente en marcha y no arriesgarlo todo en una empresa. Y estudia las opciones más baratas que la compra de equipos y la contratación de personal, como pagar a terceros fabricantes para que hagan tu producto en lugar de alquilar un espacio y comprar equipos.
Resumen
Los mayores errores que cometen los empresarios son tratar de seguir a la multitud, no ofrecer lo que los clientes realmente quieren y necesitan, y excederse en el aspecto financiero. Este último caso incluye asumir que la dedicación total sin un plan de respaldo dará como resultado el éxito, gastar sin una clara comprensión de cómo cada gasto contribuye a los resultados de la empresa y no buscar la opción de menor coste para entregar un producto o servicio.